El Papu Gómez hará bailar el once de Lopetegui

Papu Gómez ya es oficialmente nuevo jugador del Sevilla. Monchi lo ha vuelto a hacer y ha invertido los diez millones de euros que ingresará por Carlos Fernández para reforzar la vangurdia del conjunto nervionense con un jugador de clase internacional y veterano como el Papu. Procedente de Atalanta, el atacante argentino de 32 años firma por el Sevilla para las próximas tres temporadas y el club italiano ingresará unos 8 millones de euros.

Pero una vez cerrado el fichaje y el futbolista se ponga a entrenar con sus nuevos compañeros, surgirán las primeras preguntas: ¿Cómo puede hacerle hueco Lopetegui a Papu Gómez en el once del Sevilla? ¿Qué alternativas o modificaciones podría tener el sistema para adaptarse a su llegada?.

Papu Gómez es un mediapunta con mucha presencia en el área que se desenvuelve por la zona de tres cuartos. Un futbolista que, por su perfil, no tiene actualmente el Sevilla en plantilla y que, posiblemente, haya sido el principal motivo por el cual Monchi y Lopetegui han señalado en rojo su fichaje. No obstante, a pesar de ser de un perfil novedoso para el conjunto nervionense, su presencia en el once significaría sacrificar alguna pieza del actual once de gala y, eso, no parece fácil a simple vista.

Actualmente, el once de gala de Lopetegui se asienta sobre una base formada por Bono; Navas, Koundé, Diego Carlos, Acuña; Fernando, Rakitic, Jordan; Suso, Ocampos y En-Nesyri, en una especie de 4-3-3 en el que Suso utiliza mucho los movimientos interiores más que ser un extremo puro. Jugadores como Óliver suelen tener sus apariciones esporádicas en este once de gala, dejando fuera de la ecuación en ocasiones a Rakitic o a Jordan, para modificar el sistema en un 4-2-3-1 en el que el cacereño actúa por detrás del punta, más liberado de las tareas defensivas.

Papu Gómez viene de jugar en Atalanta (antes de haber sido apartado de la dinámica del equipo) en un sistema con tres centrales y dos carrileros. Su posición habitual siempre ha sido de segundo punta, mediapunta o enganche, por detrás de futbolistas como Zapata o Muriel y enlazándose con otros como Ilicic o Malinovski. No osbtante, en Sevilla no veremos este sistema con tres centrales ni el conjunto andaluz tiene el mismo estilo de juego que Atalanta, por lo que el primer paso que deberá dar el argentino es el de adaptarse a la nueva filosofía y sistema de juego que propone Julen Lopetegui. A partir de ahí, por las características del jugador, se abren dos posibles escenarios en los que el Papu podría actuar dentro del actual plan del técnico vasco: en la banda de un 4-3-3 o en la mediapunta de un 4-2-3-1.

El 4-3-3, continuidad y empaque en la medular
La entrada del Papu Gómez en un 4-3-3 significaría darle continuidad al sistema más habitual de Lopetegui esta temporada y mantener la presencia de tres futbolistas importantes en el centro del campo como son Fernando, Rakitic y Jordan. Con Ocampos fijo en una de las bandas, la entrada del Papu Gómez signifaría dejar fuera del once a Suso Fernández, otro futbolista que se ha ganado la confianza del entrenador, pero que por condiciones sería el eslabón más débil de la zona ofensiva.

Mapa rotacional del Sevilla en 4-3-3

La llegada de Papu Gómez y su inclusión en el 4-3-3, significaría mantener el bloque defensivo intacto de cara a poder hacer frente a rivales de una entidad igual o superior, pero también perjudicaría a las rotaciones debido a la desigualdad de efectivos en diferentes posiciones: muchos jugadores de banda pero pocos mediocentros. Con Papu de extremo izquierdo buscando diagonales hacia adentro, Lopetegui podrá colocar a Ocampos en la banda donde mejor ha rendido desde que llegó a Sevilla: la derecha. No obstante, tendría problemas a la hora de rotar, pues muchos jugadores se quedarían sin tener oportunidades. Además de Papu y Ocampos, Lopetegui tendría a Suso, Munir, Idrissi e incluso Óscar para completar la dos bandas, mientras que Jordan y Rakitic se quedan únicamente con Óliver como relevo, pues Vázquez no cuenta y Óscar obligaría a modificar el sistema.

El 4-2-3-1, más presencia ofensiva y reparto de posiciones
El 4-2-3-1 presenta una variante algo más ofensiva que el 4-3-3, debido a que el equipo pierde un mediocampista organizativo para colocar un mediapunta más en una linea de tres justo por detrás del delantero. Hasta ahora, esta función de enganche la solía hacer Óliver u Óscar, pero con el Papu el Sevilla ganaría mucha más presencia en el área y, probablemente, gol. La mediapunta es la posición en la que mejor se desenvuelve el Papu y, además, el once quedaría repartido con 2 jugadores por puesto que beneficiaría a las rotaciones entre las tres competiciones.

Mapa rotacional del Sevilla en 4-2-3-1

Como se puede observar, el 4-2-3-1 permite a Lopetegui repartir mejor los esfuerzos entre Rakitic y Jordan, además de poder rotar con mayor equilibrio la zona de mediapuntas o extremos, que es la mas poblada en plantilla. Con Suso, Ocampos, Munir e Idrissi para las dos bandas, la mediapunta se quedaría para hombres como Papu Gómez, Óliver y Óscar, pues Vázquez no cuenta para el técnico. Además, tanto Ocampos, Suso como Papu podrían intercambiar sus posiciones en este sistema.

Conclusión
Todo apunta a que Lopetegui seguirá alternando sistemas y nombres en sus alineaciones, debido a que sigue vivo en las tres competiciones y a que lo apretado del calendario obligará a ello para evitar lesiones. El 4-3-3 con Fernando, Rakitic y Jordan parece inamovible ante rivales de mayor entidad, pero el 4-2-3-1 podría ser muy interesante para partidos donde es obligado ganar y donde el equipo tiene superioridad clara sobre el rival. También los cinco cambios y la posibilidad de cambiar de sistema solo realizando una sustitución permitirá al técnico a intercalar ambas variantes durate el mismo encuentro.