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Facundo Roncaglia emerge del olvido
Desde octubre de 2016 el Celta no conseguía encadenar 3 victorias ligueras, a lo que hay que añadir cinco jornadas invictos si se contabilizan el empate ante Real Madrid y la importante victoria en Riazor en el último partido del pasado año. Coincide esta buena racha con la irrupción en forma de titularidad en el centro de la zaga del argentino Facundo Roncaglia (30 años).
HISTORIA DE UN RESURGIR
Dieciséis jornadas, desde la 2 hasta la 18, tuvieron que pasar para que Roncaglia volviese a ser titular en un partido liguero. Durante esas 18 jornadas no disputó ningún partido completo y tan solo participó en cuatro de ellos. Por tanto, hasta que volvió a la titularidad en la jornada 18, la participación del argentino había sido prácticamente nula.
Incluso en las dos eliminatorias disputadas por el cuadro gallego en la Copa del Rey, ante Eibar y Barça, su participación había sido testimonial, ya que tan solo disputó los últimos diez minutos del partido de ida ante el Barça en Balaidos, lo cual da idea de su importancia para Unzué durante casi toda la primera vuelta liguera. Y todo ello a pesar de la polivalencia del argentino, un fijo el año pasado con Berizzo, con quién alternaba la posición de lateral derecho, izquierdo y central.
La suerte de Roncaglia cambió con el inicio del presente año. Tras no jugar completo ningún partido hasta enero y a pesar de la debilidad defensiva mostrada por los celestes en la primera mitad de la temporada, el argentino disputó los 90 minutos en el primer partido del año ante el Real Madrid (2-2), formando dupla con el argentino Cabral.
Es probable que esta titularidad se viese favorecida por el hecho de que este partido tuvo lugar entre medias de las dos eliminatorias ante el Barça, en ambos partidos la pareja de centrales fue la formada por Sergi Gómez y Fontás (tal vez buscando el factor Masía). Sea como fuere, desde entonces, Roncaglia ha disputado completos los últimos 4 partidos ligueros, y, casualidad o no, el saldo ha sido de un empate y tres victorias, lo que coloca a los celestes en buena posición en la lucha por la Europa League.
Y EN EL FUTURO... ¿QUÉ?
Comentábamos desde este blog FF, allá por septiembre, la debilidad defensiva del Celta y la preferencia de Unzué de combinar centrales criados en la Masía (Fontás o Sergi Gómez), a los que se presupone una mayor facilidad para sacar el balón jugado, con alguno de los dos argentinos, caracterizados más por la contundencia defensiva y la rapidez al corte. Esta combinación ha prevalecido a lo largo de la temporada, si bien no siempre se ha mantenido. Así, por ejemplo, en los 4 partidos disputados por Roncaglia, en dos ha formado pareja con Sergi Gómez y en otros dos con Cabral.
Otro factor a tener en cuenta a la hora de analizar la situación en el centro de la defensa celeste, es la pérdida de confianza del cuerpo técnico en Fontás. El catalán, en consonancia con los que ha sido la defensa celtiña en la primera mitad de temporada, no ha cuajado buenas actuaciones, especialmente en lo relativo a lo que debería ser su mayor virtud, facilitar la salida de balón y el inicio del fútbol de toque. Incluso el club se ha planteado buscarle una salida, hecho que no se ha producido al caer lesionado el central del filial.
Con estos datos, y teniendo en cuenta la buena racha en la que está inmerso el Celta, sería una sorpresa que Roncaglia perdiese la titularidad en los próximos partidos. Con el argentino en el equipo, la zaga celeste gana sobre todo contundencia y velocidad en el corte a la hora de adelantarse y frenar a los atacantes rivales.
Aunque no sea su principal virtud, dada su polivalencia en la zona defensiva, Roncaglia es también un jugador acostumbrado a tener el balón en los pies. Además, se deben tener en cuenta las ganas y la motivación del jugador, que son totales siendo este un año de Mundial, puesto que ya disputó alguno de los partidos de clasificación para el mismo con la albiceleste.
Dicho esto, tampoco se podría considerar una gran sorpresa la presencia de la dupla Cabral-Sergi Gómez en alguno de los próximos partidos. Son principalmente dos los factores que podrían ayudar a ello. Por un lado, el hecho de que Unzué se haya caracterizado por realizar variaciones en las alineaciones dependiendo de las características del rival, como él mismo ha reconocido, tanto en el centro de la zaga como en el doble pivote. Por otro, el hecho de que durante el último partido liguero ante el Betis, Roncaglia cometió su mayor error en lo que va de año al medir mal un balón en largo y posteriormente cometer penalti, en lo que supuso el 3-2 definitivo ya en el descuento del partido y que por suerte no supuso pérdida de puntos.
Pese a esto, lo esperado es que en el próximo partido en Mendizorroza prevalezca el dicho que reza: “lo que funciona, no se toca” y repitan en la titularidad Roncaglia y Sergi Gómez. Pero hay que estar atentos, porque una bajada de nivel y prestaciones o entrar en una dinámica de malos resultados hará a Unzué cambiar la pareja de centrales de nuevo.