Vietto se reencuentra con su pastor

Empezó el año 2018 con un regalo de Reyes, hasta el momento, para Marcelino García Toral. El delantero argentino Luciano Vietto. Y vaya regalo después de ver su exhibición en Mestalla con un hat trick ante Las Palmas.

El fútbol es tan imprevisible como apasionante. Vietto jugó esta temporada 518 minutos en el Atlético entre Liga, Copa y Champions y no metió ningún gol. Y ahora en apenas 78 minutos ya ha marcado su primer triplete. Y además lo hizo mostrando algunas de sus principales virtudes: movilidad, lectura del juego para los desmarques al espacio y viveza en el área. Sin ser un matador en los últimos metros, nunca ha sido un mal definidor, a pesar de sus dos últimas experiencias en Madrid y Sevilla donde ha estado negado de cara al marco rival

Hablamos de un perfil de futbolista muy del gusto de Marcelino y que se está demostrando que funciona en este VCF junto a otros jugadores conocedores de la liga (Kondogbia, Murillo, Paulista, …) que vinieron con hambre por atravesar situaciones complicadas en sus anteriores clubes donde no fueron protagonistas.

En esta hoja de ruta establecida por el técnico asturiano encaja también Vietto, que viene de tener dos temporadas sin brillo en Atlético de Madrid y Sevilla.  Nada que ver con aquel delantero que deslumbró en el Villarreal a las órdenes del propio Marcelino. Hay que recordar que en la temporada 14/15, el pequeño diablo argentino completó números de crack con 20 goles y 8 asistencias.

La pregunta es dónde va a encajar el nuevo alfil en el tablero de Mestalla. A priori, el cuerpo técnico ‘che’ lo ubica de segundo punta. Como jugó en Copa ante Las Palmas, con libertad por detrás de una referencia como Zaza con la que se complementa perfectamente. Gusta que venga enrabietado, con ganas, bien físicamente y dispuesto a rendir desde el primer momento. Si bien, su posición ideal es de segundo punta, también puede jugar circunstancialmente como referencia (así lo hizo en su debut en liga ante el Girona cuando sustituyó a Santi Mina, intercambiando su posición por momentos con Rodrigo) y en menor medida en banda, si bien no son lugares donde puede explotar al 100% sus condiciones. En la punta pierde movilidad y capacidad de sorpresa; en el costado tiene más metros para irrumpir en el área y no está habituado a asumir las obligaciones defensivas que acarrea.

Otro beneficio indirecto para el grupo, puede ser lo que signifique de incentivo para Rodrigo, que no tenía demasiada competencia en la plantilla quitando a Santi Mina (aunque Guedes también puede jugar ahí) y si bien empezó la temporada como un tiro, revolucionando el ataque y marcando goles a un ritmo imposible de mantener, en el último mes ha bajado el rendimiento tanto en cuanto a chispa como a definición. Aunque son jugadores distintos. Rodrigo baja más a recibir y a generar desequilibrios y es capaz de conducir las contras, mientras que Vietto es más de apariciones en los últimos treinta metros.

Es una apuesta interesante y de poco riesgo para el Valencia y para los jugadores de los juegos fantasy. En el caso del club es una cesión con opción de compra que solo ejecutará en caso de rendimiento alto. Marcelino ha asumido en primera persona el mando de la operación convenciéndole por teléfono cuando Atlético y Sporting de Lisboa tenían ya apalabrado el trasvase. El entrenador le “prometió” minutos y confianza para recuperar la mejor versión del jugador surgido de la Academia de Racing y ha empezado a cumplir su promesa de inmediato. En el caso de los managers fantasy es una opción muy recomendable puesto que todavía su precio es asequible y tal como ha empezado es más que probable que asuma un papel protagonista en lo que resta de temporada, ya sea de inicio o desde el banquillo, en prácticamente todos los partidos que restan de temporada.

Mariano Chumillas