Autor
Juanfran-Vrsaljko, cuando el relevo generacional se convierte en el eterno dilema
El dilema entre Juanfran y Vrsaljko posee rasgos comunes con el de la semana pasada, Thomas - Gabi, pese a que en el caso del ghanés y el capitán hay un claro ganador tras ver las alineaciones que presentó el Atlético en sus dos últimos partidos oficiales.
Los candidatos a lateral derecho del Metropolitano son un veterano icono de la afición, que cumplirá los 33 años en enero y ha disputado 298 encuentros de carácter oficial con el equipo madrileño, y un potente internacional -26 veces- croata, que cumple su segunda temporada en España y costó la posiblemente sobrevalorada cantidad de dieciséis millones de euros.
Para comprender el dilema de hoy en la zona derecha de la defensa del conjunto rojiblanco, hay que remontarse a la campaña anterior. En el tramo decisivo, a partir de marzo, se lesionaron ambos futbolistas. En la Liga, la plantilla no se resintió del contratiempo y cumplió el objetivo. En Europa, sobrevivió hasta el desastre del Bernabéu con Lucas jugando en el flanco opuesto a su pronunciada zurda. Fue una posición maldita, hasta Giménez se lastimó cuando ocupó una demarcación tan inhabitual para él. Hasta primavera, cuando vinieron las bajas, empezaba a postularse el balcánico como titular.
Y Vrsaljko apuntaba a tomar, durante el presente ejercicio, definitivamente el relevo del crevillentino a pesar de que en pretemporada se repartieron los tiempos. Sin embargo, una serie de esotéricos problemas físicos siguen importunando su progresión. Sólo jugó setenta minutos en Las Palmas, para el resto de envites permaneció indisponible. De modo que Juanfran ha recuperado -titular en Valencia y Roma- protagonismo ante la forzosa ausencia de su competidor
JUANFRAN TORRES
Conmueve verle con la cabeza alta, dando el último aliento anticipadamente y esforzándose hasta el suspiro final por colocar sus cada vez menos precisos centros tras sus interminables galopadas, después del penalti de Milán ganándose el unánime perdón de su hinchada. La historia de un centrocampista, ex madridista, que mutó a defensa para sobrevivir en la elite y triunfó llegando a levantar títulos nacionales e internacionales incluso con la Selección. El cuento perfecto, estropeado por aquella frustrante final europea. Aquel día se atrevió, como a lo largo de toda su trayectoria, y se encontró con el poste; un golpe de infortunio o desgracia no empaña, en absoluto, una trayectoria jalonada con medallas.
Su plausible pasado reciente resulta incuestionable y, más allá de su admirable esfuerzo e implicación total en el club, le avalan los 391 compromisos ligueros disputados desde que Queiroz le hizo debutar en 2004. Los números demuestran que los apenas cuatro kilos que pagó el Atleti por sus servicios a Osasuna (aterrizó en la capital con la misión de reemplazar a Simao) constituyeron una sabia decisión, mas el hombre que vistió 22 veces la camiseta del combinado nacional ha perdido la incombustibilidad de antaño: brilla menos en ataque, apenas desborda, desdobla menos… Mantiene la animosa capacidad de llegar al balón cuando todo apunta a que se pierde por la línea de fondo, eso sí, si bien su disminución de fuelle motivó que el Cholo volviera a adelantar su lugar en el terreno de juego en meses precedentes.
Como volante hacía menos kilómetros que partiendo de atrás, con todo el costado para recorrer y replegar. Obviamente, el cuadro colchonero necesita laterales de ingente fondo aeróbico debido al sistema que emplea; usa carrileros, híbridos entre defensa y extremo.
SIME VRSALJKO
Aaguerrido y fuerte, dispone de algunas de las virtudes exigidas para desempeñar el rol que pide el preparador argentino. Poderoso saque de banda, cumplidor en las acciones aéreas, capaz de desenvolverse por la izquierda, contundente al cruce, disciplinado en las marcas y valiente en la toma de decisiones. Lejos de los Carvajal, Alves y compañía; otro estilo, trabajador y constante, siempre hormiga y nunca cigarra. Igualmente, sus rasgos futbolísticos se antojan completamente distintos a los de su competidor en la entidad madrileña.
Quizá cabe recordar su anecdótica y efímera estancia como medio por su lado natural, en Italia, para entender sus esporádicas aportaciones ofensivas (un gol y dos asistencias con los rojiblancos en 26 confrontaciones). Sus condiciones -sin necesidad de mirar su juventud (25)- le convierten en la opción de futuro para sustituir el hueco que deje Juanfran Torres, quien estoicamente mantiene la guardia.
Si sus contingencias físicas lo permiten, a corto plazo, el defensor de Rijeka volverá a disfrutar de la alternativa al recibir el alta. Será difícil que arroje tanta garra, coraje, pasión, entrega, corazón, sacrificio y alma como el ex internacional, pero su aportación ofrece síntomas positivos, conforme avance su adaptación mejorarán sus prestaciones con la pelota en los pies y debería reducir revoluciones para templar su fútbol.
Quién actuará desde el comienzo en la inauguración del nuevo estadio depende, fundamentalmente, del estado del zaguero surgido en la cantera del Zadar. El galgo de Crevillente nunca se rendirá y el destino tendrá con él la misma deuda que con el Atlético de Madrid, mientras tanto seguirá desbocándose de arriba a abajo prosiga o no la competitividad en su demarcación.