Emre Çolak y Valverde, víctimas de una idea de juego impopular

En Coruña Pepe Mel sigue intentado resolver esa ecuación que le trae de cabeza. Desde que comenzó la pretemporada va creciendo el número de variables y por tanto la solución es más compleja. Además los malos resultados del comienzo liguero fomentan un ambiente pesimista y de nerviosismo que no es el más óptimo de cara a pensar con calma y despejar incógnitas.

Del debate inicial del 4-3-3 o el 4-2-3-1 se ha pasado a apostar por el 4-4-2. En la previa del partido contra la Real Sociedad el técnico madrileño dijo que veía claro jugar con dos puntas, dos extremos abiertos con desborde, dos mediocentros de perfiles distintos que se complementen y una defensa que juegue de memoria. Estos cambios vienen dados por las incorporaciones que ha tenido el club en el tramo final de la pretemporada. Han llegado jugadores importantes, gente que sube la calidad media de la plantilla y de ahí que Pepe Mel tenga que encontrar alternativas para hacerles hueco. No obstante esto parece perjudicar, o por lo menos así ha pasado en estas primeras jornadas, a Emre Çolak y Fede Valverde. Ambos jugadores están llamados a aportar mucho, tanto en minutos como en la calidad de los mismos, y sin embargo hasta ahora son de los que menos han contado en los planes de Mel: 55 minutos para el turco contra el Levante y 26 para el uruguayo contra la Real Sociedad.

Emre Çolak es un jugador de una calidad indiscutible, gran canalizador de fútbol y una visión del juego privilegiada. Su puesto ideal es el de media punta, haciendo de enganche entre el centro del campo y el delantero. También podría jugar en banda, pero ahí ve limitadas sus capacidades y a día de hoy el Depor las tiene bien cubiertas (Bakkali, Cartabia, Gama, incluso Lucas o Adrián). No sería de extrañar que en las próximas probaturas veamos a Çolak cerca de Andone, teniendo a Lucas Pérez en una banda. El turco puede aportar ese último pase, esa creación en tres cuartos que mejore las estadísticas atacantes del equipo.

Por otro lado tenemos a Fede Valverde. Nadie duda de su potencial, de hecho sigue demostrándolo cada vez que tiene oportunidad. Los últimos partidos con su selección fueron más que destacados y él sigue con esa actitud positiva de querer mejorar y pelear por ganarse un puesto de titular que ahora mismo no le pertenece. Pepe Mel defendió su actuación en el debut liguero frente a la Real Sociedad diciendo que le usó como interior y no como extremo. Además el técnico ha reconocido que encajar 9 goles en 3 partidos es uno de los principales problemas por los que no se llevan más puntos, así que por ahí se puede encontrar un posible hueco al joven jugador cedido por el Real Madrid. Hasta ahora ha apostado en el medio centro por la pareja Guilherme, Mosquera, pero viendo que no están llegando los resultados puede que haya llegado el momento de ver cómo asume Valverde esta responsabilidad.

Como se puede ver, con tantos jugadores de calidad las posibilidades son innumerables, y siempre habrá unos que cuenten más que otros. De momenso, las decisiones de Mel no están gustando demasiado al público de Riazor y los resultados marcarán el futuro de los onces del técnico.